Boquete, un pequeño pueblecito mágico ubicado en las montañas chiricanas se ha convertido en uno de mis lugares preferidos del planeta. Considerado uno de los mejores sitios para retirarse, Boquete es un hermoso valle rodeado de unos paisajes maravillosos y además, donde se produce hoy en dia el café especial más cotizado del mundo. Tuve la dicha de pasar unos dias de descanso junto a mi familia lejos de las fiestas de Carnaval, y aprovechamos para disfrutar no sólo de la naturaleza si no también compartir en mesa inolvidables momentos.
Como ya no es un secreto que Boquete es el lugar ideal para vivir una vida sana y más larga que la normalmente podríamos soportar en una ciudad con un ritmo acelerado, en los últiimos tres años se ha desatado un "boom" y el pueblo está creciendo a una velocidad increible. Cinco mil extranjeros han tomado la decisión de hacer de su nuevo hogar este paraiso, mientras que para el año 2007 se espera que la cifra aumente a ocho mil.
Cada vez que voy a Boquete me encuentro con un lugar nuevo, y como podrán sospechar lo que más me interesa saber es todo lo relacionado a comida. Esta vez, descubrimos un nuevo restaurante, Delicias del Perú. (Es un karma, estoy segura). Dos noches de las cuatro que estuvimos fuimos a comer en este lugar, que sirve si no el mejor uno de los mejores ceviches de corvina que he probado en mi vida. Tiernos pero firmes y perfectos cuadros de corvina marinados brevemente con limón, ají amarillo (mirasol?) y cebollas moradas rebanadas delgaditas. Que delicia! Otro plato que me gustó mucho fue el ceviche frito, que son trozos de corvina marinada rebozados y fritos, servidos con mucha cebollita rebanada y picantitos. Probé una causa rellena de atún pero he probado mejores, papas a la huancaína, y la última noche, un lomito salteado que estuvo verdaramente delicioso. Todo acompañado de cervecitas peruanas frías, la Cuzqueña y en la segunda ocasión, una Pilsen.
Llevo unas semanas escribiendo sobre la gastronomía peruana y me sorprendió encontrarla en este remoto lugar del interior de mi país. Aunque en Delicias del Perú se sirve una comida sencilla y tradicional, es admirable el esfuerzo que hay detrás de la cocina de este restaurante por utilizar lo necesario para lograr platos auténticos elaborados con ingredientes de verdad.
Boquete me sonrío, a mi y a mi familia. La foto que aparece al comienzo es de un espectacular y perfecto Arco Iris que pudimos ver el día domingo. Qué mejor adorno para complementar la inigualable naturaleza y paisajes de mi Boquete querido!
Nota: No pude tomar fotos del ceviche porque apenas lo trajeron a la mesa desapareció.Etiquetas: cocina peruana, restaurantes, viajes