Se estima que entre el 15% y 20% de toda la proteína animal que consumimos proviene de los habitantes del mar, y representa el alimento principal en la dieta de una gran parte de la población mundial. El pescado es altamente nutricional y es rico en vitaminas A y D, fósforo, magnesio, selenio y yodo. Estudios recientes demuestran que el pescado es mucho más que una excelente alternativa de proteína. Los pescados son la fuente más rica de un tipo de ácido graso, el Omega-3, que es vital para el desarrollo normal del cerebro humano. Consumir pescado regularmente ayuda a prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, derrames, deterioro mental y el cáncer de próstata.
He sido invitada a participar como chef embajadora en Cooking for Solutions, un evento para promover el consumo de pescados y mariscos obtenidos por métodos sostenibles que tendrá lugar en Acuario de la Bahía de Monterrey, California, EU, el próximo mes de mayo, y considero apropiado aprovechar este espacio para escribir sobre un tema que es crítico y del cual es necesario crear consciencia en el consumidor. Por primera vez en la historia, está amenazada la principal fuente de alimentos en muchas regiones del planeta y el estado de los recursos pesqueros es preocupante.
Cuando nos disponemos a comprar pescado y mariscos en los mercados, generalmente solo tomamos en cuenta su sabor, su frescura y el precio. Pero, ¿alguna vez nos detenemos a pensar en el impacto que nuestra elección hace en el medio ambiente? Cada vez que elegimos un pescado afectamos el futuro de los océanos. Muchas especies de peces se encuentran en grave peligro de extinción debido a prácticas irresponsables de pesca y métodos de crianza insalubres y peligrosos. Una solución a este problema recurrente es la educación y el consumo de pescados y mariscos obtenidos con métodos de pesca sostenible.
¿Qué es "pesca sostenible”?
Los pescados y mariscos sostenibles son aquellos que han sido atrapados o criados en consideración de la viabilidad a largo plazo de las especies marinas individuales y el balance ecológico de los océanos en general. Hay cuatro factores relacionados a la pesca sostenible: la sobre explotación pesquera, la captura accesoria, el daño al hábitat y la acuicultura. Veamos qué significa cada uno de ellos.
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